Detectando tu tipo de liderazgo
Según un estudio en Chile de la plataforma Laborum (2022), “…más de la mitad de los trabajadores ha pensado en renunciar a su trabajo por culpa de sus jefes. El 87% cree, además, que no siempre los jefes o jefas son los mejores líderes, mientras que sólo el 54% los identifican como un líder, siendo la cifra más baja de la región”. Así que el tema del liderazgo es muy importante dentro de las empresas.
Entonces, ¿cómo podemos detectar nuestro tipo de liderazgo a fin de poder impactar positivamente en la vida de nuestros/as colaboradores/as? Te dejo algunas ideas clave que pueden servir de guía:
Compréndete: ¿Conoces los rasgos de tu personalidad? Piensa: ¿cuáles son tus rasgos dominantes y cómo estos pueden relacionarse con tu estilo de liderazgo? Es importante no intentar ser quien no eres.
Considera tus valores base:. ¿Con qué valores construyes tu reputación? Identifícalos para comprender cómo afectan a tu estilo de liderazgo.
Acepta tus debilidades: Todos tenemos fortalezas y debilidades; es importante comprender cuáles son y cómo te afectan. Si no eres espontáneo, es posible que no te resulte fácil ser un líder carismático. Sin embargo, con el tiempo podrías lograr ese estilo de liderazgo trabajando tus debilidades.
No le temas a la retroalimentación: Si no estás seguro de tu estilo de liderazgo actual o quieres mejorarlo, puedes solicitar a tu equipo y entorno una valoración honesta. Así podrás perfeccionarlo y/o adaptarlo si es necesario.
Aprendizaje constante de otros líderes. Piensa en los líderes que te han inspirado y aprende de ellos. Si no tienes uno, búscalo. Pregúntate qué te gustó de su forma de liderar. Pensar en sus características te ayudará a establecer tu propio estilo de liderazgo.
Te comparto, además algunos ejemplos sobre cómo autoevaluarte:
Cuando se trata de dar órdenes…
¿Realmente me gusta dar órdenes o prefiero dejar que cada persona haga su tarea según su criterio?
¿Yo digo a los miembros del grupo qué deben hacer, cómo y cuándo quiero que se haga?
Proporciono directrices, ¿pero también ofrezco apoyo? ¿Acepto la retroalimentación del equipo?
Si un miembro del grupo comete un error…
Debe poder encontrar la manera de resolverlo por su cuenta.
Tiene que ser reprendido y sancionado si es preciso.
Necesita mayor apoyo y una orientación adicional.
Cuando hay que tomar decisiones…
Tomo la decisión final, ¿pero acepto las ideas que me dan los miembros de mi equipo?
¿Tengo la última palabra sobre las decisiones tomadas en mi equipo?
¿Dejo que los miembros del grupo tomen sus propias decisiones?
Tengo en cuenta las sugerencias realizadas por otros miembros del grupo?
Sí. La colaboración es la clave del éxito.
Raramente. Soy el miembro que más conocimientos tiene del grupo.
Siempre. Me baso en el grupo para decidir nuestra dirección.
Finalmente recuerda que las habilidades de un líder se pueden refinar con el tiempo, por lo tanto, aprende de los errores y comprende que quieres y necesitas lograr.
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